El protocolo es una disciplina científica transversal con carácter multidisciplinar


Maria Dolores Sanchez Gonzalez

Directora del Master en Protocolo, del Especialista en Comunicación, Protocolo y Relaciones Públicas y del Experto en Relaciones Institucionales y Protocolo, de la UNED

Profesora Titular de la Facultad de Derecho de la UNED. Sus últimas investigaciones se centran en el Protocolo institucional, la Comunicación Institucional, las Relaciones Institucionales y la Historia del ceremonial y del protocolo,
Académica correspondiente de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación, por acuerdo de su Junta de gobierno de 15/06/2009, y miembro del Instituto Internacional de Historia del Derecho Indiano (2008), así como del Instituto de Historia de la Intolerancia (2009).
Es Presidenta y fundadora de la Sociedad de Estudios Institucionales y Directora de la Revista Estudios Institucionales.
Miembro del Consejo editorial de la Revista COMPÉ (Comunicación y Protocolo), de LAUREA, y de numerosos comités científicos.

Por el Sr. Josep Solà i Parés

“El protocolo es una disciplina científica transversal con carácter multidisciplinar.”

Maria Dolores Sanchez Gonzalez

Dolores, ¿Cómo y cuándo empiezas a trabajar con el Protocolo y las Relaciones Institucionales?

Como Profesora Titular de Historia del Derecho y de las Instituciones de la UNED, había tenido acceso al análisis de los múltiples conflictos de precedencia existentes en nuestro pasado institucional valorando la importancia del carácter simbólico de las manifestaciones del poder, además de haber realizado muchos estudios referentes a la Historia de la Casa Real y sus órganos administrativos. Al investigar sobre el tema tuve conciencia de los escasos avances científicos sobre la materia, de la necesidad de pasar de la mera plasmación de las prácticas de los profesionales a un plano más teórico, y de la necesidad de poner un poco de orden en los conocimientos existentes sobre el Protocolo -escasos, dispersos y focalizados en un par de organizaciones- para que los profesionales pudieran aprender a potenciar la imagen que la sociedad tiene de las instituciones.

Es así como en el año 2002 presenté el curso de Experto Universitario en Relaciones Institucionales y Protocolo a mi Universidad (la UNED) como un Postgrado serio y solvente, que sería seguido al año siguiente por el Master en Protocolo, por lo que llevamos ya doce años. El protocolo se convierte pronto en una línea de investigación atractiva y fecunda para un investigador y docente, muy demandada por la sociedad, y muy proclive para poder ejercitar I+D (Investigación y Desarrollo), dada la continua necesidad de transferencia de resultados.

Define Protocolo con una palabra o una frase.

El protocolo es, en sentido amplio, el conjunto de normas, usos sociales y costumbres que determinan cuál el orden de celebración o realización de un determinado acto o evento, bien sea de naturaleza pública o privada.

Un buen jefe / una buena jefa de Protocolo y Relaciones Institucionales debe ser una persona …

… amante del orden, con sentido de la armonía y de la proporción, con “don de gentes” y mucha flexibilidad y tolerancia.

¿Me podrías definir cuáles son las funciones del profesional del Protocolo?

Es difícil. Pero sí te puedo decir lo que no es: el profesional del protocolo, no es un mero acomodador. El profesional del protocolo tampoco es un jefe de gabinete, ni un jefe de comunicación, pero debe interactuar con éstos. El profesional del protocolo es el encargado de potenciar la imagen de la institución o empresa a cuyo servicio trabaja, por ello debe tener mucho de relacionista público. Sus funciones se concretan en saber transmitir el mensaje que le han encargado desde la organización, a los públicos a los que va dirigido.

¿Qué consejo darías a la gente que está estudiando Protocolo o a la que ahora está empezando en esta profesión?

Que tenga paciencia. Son épocas duras. Nos avecina un futuro incierto. Pero es una profesión muy bonita, y muy gratificante, aunque los mayores éxitos que cosechen pasarán desapercibidos (pero así debe ser).

¿Qué nuevas disciplinas/áreas/estudios crees que son necesarios para un buen profesional del Protocolo del siglo XXI?

Idiomas (fundamentalmente inglés que se impone en nuestro tiempo), relaciones públicas, comunicación y derecho.

¿Tienes la impresión que el mundo del Protocolo ha tenido la evolución que esperabas?

Si, porque el protocolo no es sólo una herramienta o instrumento para colocar gentes, ni una disciplina específica de una determinada carrera. El protocolo es una disciplina científica transversal con carácter multidisciplinar y, como muestra, en breve asistiremos a la implantación de un Master en Protocolo en una Facultad de Derecho de nuestro país: la UNED. El primer paso para construir una ciencia.

¿Qué opinión tienes del futuro del Protocolo y las Relaciones Institucionales?

Protocolo y Relaciones Institucionales tienen su futuro garantizado en el ámbito de los estudios institucionales y de la propia administración, convirtiéndose en algo imprescindible, partiendo de la premisa de la concepción de las Relaciones Institucionales no sólo como “lobbismo”, sino también como relaciones públicas especializadas, como he dicho en muchas ocasiones, por la imperante necesidad de la administración de salir de ese autismo que le caracteriza y empezar a comunicar, con otras instituciones y con los administrados, su público.

El Protocolo y las nuevas tecnologías. ¿Crees que hacen el trabajo más fácil o simplemente distinto?

Las Nuevas Tecnologías siempre deben hacer el trabajo más fácil, si no no son útiles para los especialistas. Desde esta premisa las NT pueden contribuir a crear nuevos espacios y aportar nuevas soluciones técnicas a nuestro trabajo. Las NT son una herramienta indispensable para el trabajo diario del protocolista, pero deben ser realizadas pensando en el mismo.

La normativa, tanto autonómica como estatal, ¿responde a las necesidades actuales? ¿En qué sentido debería renovarse?

No. Por un lado, a nivel estatal, el obsoletísimo Decreto de Precedencias se ha ido al traste con la última modificación del gobierno para encajar la figura de los reyes, y frente a las voces que piden su mantenimiento creo que ya es hora de al menos articular una ley de bases con las suficientes pautas generales para poder dar lugar a un texto articulado mínimo genérico que pueda ser desarrollado a nivel autonómico. A nivel autonómico, asistimos a la doble condición de una burbuja normativa en algunas comunidades, para encontrarnos con una carencia casi absoluta en otras. Unos se han pasado haciendo su trabajo y otros no han llegado a hacer los deberes. En este sentido, debería regularse lo mínimo, es decir sentar las bases y regular las Instituciones del Estado, para dejar después autonomía para un desarrollo posterior.

¿Te sientes valorada en tu trabajo?

Si. Cada vez más. Antes mis compañeros no entendían bien que siendo de Derecho me dedicase al protocolo (incomprensiblemente, pues el protocolo también es derecho), pero ya no cuestionan el carácter normativo y fuerte componente jurídico del protocolo, y el que pueda ser objeto de estudio científico.

¿Nos puedes explicar alguna anécdota o situación comprometida que hayas vivido relacionada con el Protocolo?

Con ocasión de la última investidura de doctores en mi Universidad, uno de mis ex doctorandos (ya es doctor, por cierto de la primera tesis de protocolo defendida en una Facultad de Derecho en España) era investido solemnemente y al reunir la doble condición de doctor en derecho y teología, tanto la botonadura como las borlas llevaban mezclados los colores blanco y rojo (por corresponder a esas carreras) lo suscitó gran expectación entre los asistentes por lo inusual, y alguien del público preguntó si era del Atlético… 

¿Nos darías algún consejo?

Ninguno. Lo hacéis muy bien informando continuamente no sólo a vuestros afiliados sino a todos los interesados en el mundo del Protocolo y las Relaciones Institucionales, con unos newsletters variados, imparciales y cuyo único interés es informativo y difusor.

¿Alguna cosa más?

Desearos que sigáis haciendo tanto como hacéis para la defensa no sólo de vuestros asociados sino de la profesión entera, y daros las gracias por vuestra amabilidad, buena disposición y cercanía en todo momento.

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